La reciente decisión del Banco Central Europeo (BCE) de reducir nuevamente los tipos de interés ha encendido las expectativas de una mayor competencia entre las entidades bancarias para atraer nuevos clientes hipotecarios. Este recorte, de 25 puntos básicos, ha dejado el tipo de depósito en un 3,5%, lo que afecta directamente tanto a los hipotecados como a los ahorradores. Mientras que quienes tienen hipotecas variables verán una reducción significativa en sus cuotas mensuales, los productos de ahorro, como los depósitos a plazo fijo, ofrecen rendimientos cada vez más bajos
En el caso de los hipotecados con préstamos variables, la reducción en la cuota mensual puede ser considerable, oscilando entre 80 y 190 euros al mes dependiendo del monto del préstamo y el plazo. Esto puede suponer un ahorro anual de hasta 2.300 euros, lo cual representa un respiro financiero importante, especialmente para aquellos que tienen revisiones programadas en estos meses
Esta bajada de tipos también es un incentivo para que nuevos compradores se animen a entrar en el mercado inmobiliario, lo que podría incrementar la demanda de hipotecas en un 30% según Fotocasa
Sin embargo, este aumento de la demanda podría ejercer más presión sobre los precios de las viviendas, que ya llevan meses al alza, dificultando el acceso a la propiedad para algunos compradores
Por otro lado, los ahorradores ven cómo la rentabilidad de sus productos de renta fija se reduce. Los depósitos, que hasta hace poco ofrecían rentabilidades por encima del 3%, ya han comenzado a ajustar sus tasas a la baja. Aunque algunos bancos aún ofrecen plazos atractivos, los expertos sugieren actuar rápido para asegurar las mejores rentabilidades antes de que los tipos continúen descendiendo
En cuanto a la oferta hipotecaria, destaca el auge de las hipotecas mixtas, que han experimentado un fuerte crecimiento en los últimos meses. Estas combinan un interés fijo inicial (generalmente entre cinco y quince años) con una tasa variable para el resto del plazo. Las entidades bancarias han comenzado a promover este tipo de productos, reduciendo los tipos fijos en el tramo inicial para hacerlo más atractivo en comparación con las hipotecas a tipo fijo tradicional, cuya demanda ha disminuido en favor de estas opciones más flexibles
. Esta tendencia podría intensificarse en 2025, especialmente si el BCE continúa con su política de recortes de tipos y el Euríbor sigue descendiendo
Finalmente, aunque el panorama hipotecario es más favorable para los prestatarios, los expertos advierten que el BCE podría enfrentar resistencia a la hora de seguir bajando los tipos. Algunos analistas sugieren que el recorte actual es más controvertido de lo que parece, ya que si bien busca estimular el crecimiento económico, podría desincentivar el ahorro y complicar la gestión de la inflación en el futuro.
Fuentes: